Medieval Escudo

El Escudo es un tipo de escudo que se utilizó durante toda la Edad Media tanto por caballeros como por soldados.

En el siglo X, los escudos eran más largos y podían colocarse en el suelo. Hacia el siglo XIII, gracias a la mejora de las armaduras, su longitud disminuirá, haciéndolas más ligeras y manejables.

Esta reproducción está basada en trabajos arqueológicos y fuentes históricas, aunque los Materiales han evolucionado, su método de fabricación es generalmente el mismo que en la época.

Aquí tenemos un tablero de contrachapado de 5 mm de grosor, que ha sido curvado para obtener esta forma abovedada y facilitar la desviación de los golpes.

La estructura está reforzada por tacos transversales y una cinta de yute en los bordes consolida la estructura.

Cada lado del escudo está cubierto de lino que puede ser pintado con su escudo de armas.

En la parte posterior, unas correas de cuero permiten ajustar el soporte alrededor del brazo y son lo suficientemente anchas como para poder llevar un guantelete detrás del escudo.

Entre el brazo y el escudo hay un cojín acolchado para minimizar los impactos y mejorar la comodidad en el combate.